Japón es un país fascinante en el que me encontré con soluciones ingeniosas para problemas realmente peculiares.
¿Sabes lo que es un hotel capsula? Pues la respuesta a que los metros y trenes de Tokyo dejen de circular entre la medianoche y la una y no vuelva a haber servicios hasta las cinco o seis de la mañana. Y eso tiene consecuencias indeseadas para la gigantesca urbe. Calificar a Tokio de megalópoli es quedarse corto: más de 13 millones de habitantes viven en la ciudad (compuesta de 23 prefecturas) y la cifra aumenta hasta los 35 millones en el área metropolitana. Apenas 12 millones menos que el total de los habitantes de España.
Todos los días, millones de oficinistas usan el metro o el ferrocarril para llegar a su puesto de trabajo. Muchos de ellos saldrán realmente tarde de la oficina, irán con sus compañeros a un karaoke o una izakaya (taberna) y se pondrán de alcohol hasta las orejas para descargar tensiones.
En ese lamentable estado pueden ocurrir dos cosas: que lleguen a tiempo de subirse a uno de los últimos trenes (y que tengan suerte de que no se quede parado en mitad del trayecto, porque para los horarios los japoneses son más suizos que los suizos) o que prefieran quedarse en Tokio a pasar la noche, porque tienen un aspecto que no hay esposa que se lo perdone.
Tip de Alojamiento
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¿Dónde alojarse en una abarrotada y cara ciudad en esas circunstancias? Hacer virtud de la necesidad es lo que debió pensar el arquitecto Kisho Kurokawa cuando en 1979 construyó el primer Hotel Capsula, un alojamiento que sirve básicamente para pasar la noche, o unas pocas horas de descanso, y donde la habitación es una «cápsula» (alguno dirá que es un ataúd más espacioso) de unos 2m x 1m x 1,25m debajo, o encima, de otra cápsula similar, a la que se accede por la zona de los pies, en un pasillo donde hay filas de cápsulas similares.
En un Hotel Capsula se ofrecen servicios como saunas, máquinas de refrescos y comidas y el interior de las cápsulas suele tener televisión, radio, aire acondicionado y acceso a Internet. Para pasar sólo unas horas no suena tan mal ¿verdad?
Yo iba dispuesto a probar algo así durante mi estancia en Japón pero la ausencia de zonas comunes donde charlar con otros viajeros y la obvia orientación de las cápsulas hacia otra tipo de cliente, más ruidoso, me hizo decantarme por un término medio, y lo encontré en el Hotel Capsule Ryokan Kyoto.
Creo que la forma más corta de describir las capsulas es «literas cerradas«. Como podéis ver en el vídeo – la primera parte fue grabado después de varias horas de viaje desde Hiroshima – , el área del dormitorio, donde sólo hay 8 camas, es cualquier cosa menos claustrofóbica (al menos para mí).
En otro artículo os contaré más detalles sobre ester recomendable hotel, a sólo 10 minutos caminando de la estación de tren de Kyoto, y espero que el vídeo os haya animado a probar un alojamiento menos convencional pero nada extraño…para estar en Japón.
Hola Pigafe:
Yo soy de los que (señoritas, no sigan leyendo) da muchas vueltas en la cama pero te aseguro que me he llevado más golpes en la frente durmiendo en camas de amigos (porque estaban junto a la pared y cuando duermes no sabes si estás o no en tu casa) que dentro de esa cápsula tan poco clásica ;)
Ah, y a mí mejor no me lleves a un karaoke que Dios tampoco me dio voz ;)
Un saludo,
J
Sinceramente a mi no me gustaría nada dormir ahí porque soy de los impredecibles mientras duerme por lo que algún chichón me haría, jajaja. De pensarlo me da un poco de claustrofobia así que optaría por el karaoke hasta que salga el sol.
Hola Javier:
Si es del estilo que me imagino, el original, diseñado para japoneses en las circunstancias que comentaba antes, imagino que lo que menos hiciste fue dormir :O
En mi caso, fueron noches bastante tranquilas :)
Un saludo,
J
Hola Avistu! Veo que tu experiencia ha sido positiva. Yo dormí en una cápsula también, pero de distinto tipo, en Shinjuku, en Tokyo, y mejor no lo cuento. Eso fue para probarlo una vez y nunca más. En tu caso ya veo que no…
Saludos!