El Castillo de Sotomayor (Soutomaior) en las Rías Baixas

España es tierra de castillos y aún se pueden visitar muchos castillos bien conservados, aunque de otros sólo queda el recuerdo de la gloria pasada y unas pocas piedras presentes.

Nos los imaginamos en islas y costas, de Palma de Mallorca (Castillo de Bellver) a Alicante (Castillo de Castalla, Castillo de Biar, Castillo de Viena o el Castillo de Santa Barbara) o, sobre todo, en el antiguo reino al que estas fortalezas unieron su nombre en la expresión “Castilla es tierra de castillos”, como el Castillo de Belmonte.

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Pero, noticia que no debería serlo, el norte de España también mantiene aún en pie castillos muy bien conservados, como es el caso del Castillo de Sotomayor o Castelo de Soutomaior, en gallego, porque, si, se encuentra en Galicia.

Ya sabemos que Galicia es tierra de rías, Altas y Bajas, en función de dónde se ubiquen en relación a Finisterre, pero también de sorpresas como un castillo excelentemente conservado y abierto al público.

Nos tenemos que ir al sur de Finisterre, a las Rías Bajas, aquí llamadas Rías Baixas, una zona de gastronomía y turismo ideal para una ruta en coche, para conocer este antiguo castillo que mudó a palacio y residencia de verano para, tras décadas de abandono, iniciar una nueva vida como Castillo – Museo y visita guiada altamente recomendable, el Castillo de Sotomayor.

El Castelo de Soutomaior aparece por primera vez en la Historia en el siglo XII, como una fortificación compacta que dominaba el sur del valle del Río Verdugo, en un punto de comunicación estratégico entre áreas de Galicia pero también, por su cercanía a la Ría de Vigo y a la frontera con Portugal, para repeler ataques piratas e incursiones extranjeras.

A finales del siglo XV, las revueltas campesinas en Galicia (la Revuelta Irmandiña) lo destruyen parcialmente.

En su reconstrucción y mejora aparece en escena Pedro Madruga o Pedro Álvarez de Sotomayor, uno de los señores feudales más poderosos de Galicia.

Los posteriores siglos de paz lo fueron también de abandono, hasta que a finales del siglo XIX Antonio Aguilar Correa, Marqués de la Vega de Armijo hereda el castillo y lo acondiciona como residencia palaciega.

Ministro que tuvo varias carteras y llegó a Presidente del Gobierno, reforma el castillo incluyendo una biblioteca, una capilla y una galería neogótica (la “Galería de las Damas”). Además, parte de los campos que rodean al castillo se convierten en un jardín con estanque, fuente y castillos centenarios entre otros vegetales pobladores.

Fue una moderna e innovadora sobrina suya, María Vinyal y Ferrers, casada con el Marqués de Ayerbe, la que en 1904 publica la primera cronología del castillo, “El Castillo del Marqués de Mos en Sotomayor. Apuntes históricos”.

A la muerte de su tío y de su marido, se vuelve a casar pero deudas y tropiezos económicos provocaron que el castillo saliera a subasta pública en 1917. Como siglos antes, hubo un abandono progresivo del mismo hasta que la Diputación de Pontevedra lo adquiere en 1982 para renovarlo y abrirlo al público como museo.

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Lectura recomendada

Aunque hayas visto el vídeo, te recomendamos leer nuestra experiencia en la visita guiada al Castillo de Sotomayor, que además contiene información útil para preparar tu visita.

Dónde alojarse en Rías Baixas

Si visitas el Castillo de Sotomayor como parte de un viaje por Galicia, te pueden interesar nuestras recomendaciones de alojamiento basadas en nuestro viaje en coche de alquiler recorriendo las Rías Baixas. Hicimos noche en cuatro sitios distintos que a continuación os indicamos (con enlace para que podáis ampliar la información y reservar habitación si os interesa).

Hotel América en Vigo, céntrico, moderno y con estupendas vistas desde la terraza en la última planta, donde se servía el desayuno.

Hotel Talaso Atlántico, muy cerca de Bayona (o Baiona en gallego), habitaciones adecuadas con vistas al Océano Atlántico en un complejo de talasoterapia (imprescindible probar la piscina de agua salada).

Hotel Natureza Nande en Rubiós (sólo a 38 km de Vigo), junto a la bodega Señorío de Rubiós (se incluye una visita a la misma al reservar habitación) en un entorno de tranquilidad rural, donde nos alojamos en confortables y modernas habitaciones. El restaurante anexo es muy recomendable, especialmente teniendo en cuenta que en los maridajes de los platos os animo a probar vinos de la propia bodega.

A Casa de Aldán, en el puerto de Aldán, ideal para alojarnos después de explorar la Senda Costera y el Cabo Home. Es una antigua fábrica de salazón rehabilitada, donde reinan la piedra y la madera, con vistas al puerto pesquero. Uno de esos detalles que se agradecen es que cuando preguntamos por un sitio para cenar y explicamos el tipo de comida que queríamos, en lugar de insistir en que fueramos a cenar al restaurante del establecimiento, nos recomendaron dos sitios distintos más adecuados a lo que queríamos para esa noche.

Visitar el Castillo de Sotomayor es una experiencia recomendable en un viaje por Galicia. La gastronomía y el vino, los miradores a rías y montes o las curiosidades como los monjes artilleros, son el complemento perfecto para, también, hacer visitas como la del Castillo de Sotomayor.

Porque además de paisajes y naturaleza, en las Rías Baixas las piedras hablan.