Las mejores cosas que hacer y ver en Braga

A poco más de 50 km de la preciosa ciudad de Oporto, en dirección noreste, otra joya demuestra que viajar por el norte de Portugal es una auténtica delicia. Se trata de Braga, una de las ciudades más antiguas de Portugal y cuya belleza patrimonial deja atónitos a todos los viajeros. Y es que Braga ha sido, tradicionalmente, la capital religiosa de Portugal, con una archidiócesis constituida nada menos que en el siglo IV. Pero también es una urbe con una larga tradición universitaria – aquí se halla la universidad más antigua del país -, lo que hace que se mantenga joven y llena de vida, con muchísimas actividades culturales y una vida nocturna que poco tiene que envidiar a las Lisboa u Oporto. Si quieres disfrutar de esto y mucho más, aquí te dejamos una pequeña selección de las mejores cosas que ver y hacer en Braga.

Visitamos Braga como parte de nuestro tercer viaje a Oporto, una ciudad en la que no me importaría vivir durante una temporada. Siempre nos había quedado en el tintero, así que decidimos dedicar un día entero a conocer esa perla de la que tan bien nos habían hablado. Al final, creo que nos quedamos cortos, pues aunque Braga se puede llegar a ver en un día, es un lugar que merece la pena ser explorado con tranquilidad.

Pero antes de entrar de lleno en las mejores cosas que ver en Braga, vamos con un poco de logística:

Cómo llegar a Braga

Braga está, por carretera, a 54,5 km de Oporto. Si has alquilado un coche en el aeropuerto de Oporto (o en la ciudad), esa será la forma más cómoda y rápida de visitar la ciudad. Tardarás unos 45-50 minutos en viajar de Oporto a Braga.

Sin embargo, si solo has viajado a Oporto para conocer la ciudad que se asienta en la ribera del Duero y la idea de ir a Braga se ha planteado como una excursión corta, y no como parte de un roadtrip por el norte de Portugal, lo mejor que puedes hacer para ir a Braga es tomar uno de los trenes que parten de la céntrica estación de São Bento, en Oporto.

Eso es lo que hicimos nosotros y fue un viaje muy tranquilo y entretenido, ya que el tren, tras abandonar Oporto, va pasando por un buen número de pueblecitos rurales de la zona y bonitos paisajes.

El viaje, según el servicio que cojas, puede llevar entre unos 50 y 70 minutos.

Hay muchísimos trenes cada día para cubrir el trayecto. Puedes consultar todos los horarios actualizados aquí.

El precio del billete (que es a la zona 8 del transporte de Oporto) está en torno a los 6.50 euros (ida y vuelta).

Otra opción es el autobús, pero es más caro que el tren y tiene menos frecuencia. No te lo aconsejo.

Dónde dormir en Braga

Aunque nosotros hicimos una excursión de día completo y regresamos a Oporto para dormir, lo cierto es que hay tantas bellas cosas que ver en Braga, que es una gran idea alargar la estancia y quedarse, al menos, una noche en la ciudad.

Si esa es tu decisión, estos son algunos buenos hoteles y apartamentos donde dormir en Braga (según las opiniones de los usuarios):

• Braga Heritage Lofts: espectaculares lofts en el mismísimo centro histórico de la ciudad, y a muy buen precio. Suelo de parquet, cocina totalmente equipada y decorados con el máximo gusto.
• Hotel Bracara Augusta: precioso y céntrico hotel cuatro estrellas alojado en un antiguo edificio del siglo XIV. Las habitaciones cuenta con paredes de piedra y está decoradas con mobiliario moderno y sencillo. Ideal para una escapada en pareja en Braga.
• The Arch apartamentos: apartamentos modernos y totalmente equipados en el centro de Braga.

Las mejores cosas que ver y hacer en Braga

Y ahora que ya tienes controladas las partes más importantes de la logística del viaje, llega el momento de entrar de lleno en las mejores cosas que ver en Braga.

La Catedral de Braga

Es normal que la catedral sea una de las mejores cosas que ver en Braga, pues no hay que olvidar que es un centro religioso de gran importancia desde antes de la Edad Media.

Además, si te gusta la arquitectura, vas a disfrutar mucho con esta visita, al haber un poco de varios estilos arquitectónicos en el edificio. Es lo que solía ocurrir con las iglesias y monumentos religiosos que comenzaban a levantarse en el románico (siglo XII), pero después sufrían innumerables renovaciones y extensiones durante los siguientes siglos.

Así, en la catedral de Braga encontrarás elementos y decoración románicos, góticos, manuelinos, renacentistas y barrocos.

La triple nave románica sigue siendo fácil de identificar, pero lo que llamará tu atención de inmediato son los dos órganos barrocos de 1737 y 1739, con estuches cubiertos con exuberante madera dorada.

Busca, también, la pila bautismal, que tiene un diseño manuelino, y no te pierdas la impresionante tumba del siglo XV, en la que descansa el hijo del rey Juan I, Alfonso. Está hecha de madera recubierta de oro y cobre plateado.

Santuario del Bom Jesus do Monte

A pesar de que la catedral es uno de los monumentos más importantes que ver en Braga, a mí no hubo otro que me gustara más que el espectacular santuario del Bom Jesus do Monte. Este lugar fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco, y cuando lo visitas entiendes la razón.

Aunque dedicaré un artículo completo al santuario, aquí te dejo un pequeño resumen de lo que podrás encontrar.

El santuario de Bom Jesus do Monte se encuentra dominando una colina en el este de la ciudad. Se trata de un lugar de peregrinaje que ha atraído a devotos religiosos desde al menos el siglo XIV.

Y devoto es lo que hay que ser para subir la escalera, que se eleva más de 100 metros y tiene 640 escalones. Estas escaleras zigzaguean por la pendiente y están adornadas con esculturas barrocas y fuentes para inspirarte mientras subes.

Tu objetivo será llegar a una iglesia neoclásica terminada en 1834, pero el verdadero atractivo radica en el viaje.

Además, el lugar te brinda la mejor panorámica que ver en Braga y posee unos bonitos y refrescantes jardines en un pequeño parque con estanque.

Si te quieres ahorrar el tema de las escaleras, siempre podrás subir hasta la iglesia en el antiguo funicular que ya tiene casi 140 años. Montar en él es un auténtico viaje al pasado.

Jardín de Santa Bárbara

Este exquisito jardín formal se encuentra junto al palacio episcopal medieval de Braga y delimitado por los hermosos muros norte del palacio, coronados por típicas almenas puntiagudas.

El jardín es estricto y ordenado, con líneas geométricas y setos bien cuidados. Dentro de las parcelas delimitadas hay una gran cantidad de flores de colores en el verano, que atraen a muchos pájaros.

De regreso al palacio, en él encontrarás los restos de una arcada gótica que delimita el patio del palacio, y en la mampostería de las paredes se pueden distinguir fragmentos de esculturas y escudos de armas.

Sin duda, se trata de uno de los mejores atractivos naturales que ver en Braga.

La Plaza de la República

Si vagas sin un rumbo determinado por el casco histórico de Braga – que es lo que hicimos nosotros – siempre acabas de desembocando en la bonita y grande Plaza de la República, o «Arcada», como la conoce la gente local. El nombre se refiere al edificio porticado del siglo XVIII que hay en el lado oeste de la plaza.

La plaza en sí fue trazada en el siglo XIX y es larga y grandiosa, estando acotada por varios bellos edificios de apartamentos.

Mucha gente comienza su visita a Braga desde este punto, porque la oficina de turismo está aquí, pero también por la cantidad de lugares de interés en la plaza (Igreja da Lapa y la hermosa fuente) y las calles radiantes.

Durante el día también es un lugar ideal para encontrar algo de sombra y tomarte una bebida fría. Por la noche puedes venir a cenar algo en este majestuoso entorno. En las agradables tardes veraniegas, tendrás que intentar reservar con antelación, pues la terraza está realmente solicitada.

Museo Biscainhos

Otra de las mejores cosas culturales que hacer en Braga es visitar el Museo dos Biscainhos.

Esta casa museo se encuentra en la plaza que lleva su nombre, albergándose en un resplandeciente palacio aristocrático de los siglos XVII y XVIII, que cuenta con suntuosos jardines.

Es una auténtica ventana a la vida de la nobleza portuguesa, y no falta una decoración refinada en el interior. Verás unos magníficos azulejos (tejas ibéricas pintadas) y magistrales molduras de estuco, junto con colecciones de cristalería, mobiliario, joyería, cerámica e instrumentos musicales.

Los terrenos del exterior, de una hectárea aproximadamente, están enriquecidos con fuentes y esculturas y fueron ajardinados en 1750. Hay un área de huerto dispuesta en un parterre, y un jardín formal con esculturas laberínticas de boj.

Estos están considerados entre los mejores jardines del siglo XVIII en Portugal.

Arco de la Puerta Nueva

En la entrada este del centro histórico de Braga, este arco de triunfo es una de las mejores cosas que ver en Braga.

Fue elaborado por el escultor André Soares de Braga, a mediados del siglo XVIII, un hombre cuyo nombre está íntimamente ligado al de la ciudad, ya que contribuyó con varias fuentes y esculturas aquí.

Este arco reemplazó a una antigua puerta de entrada y muestra una cara muy diferente según el lado desde el que lo observes. El lado este es sencillo, con un nicho con una escultura mariana (Nossa Senhora da Nazaré), mientras que el lado oeste es mucho más atrevido, con un escudo de armas de piedra y pináculos piramidales sobre un arco barroco.

El Palacio Raio

Caminando por el casco histórico, nos encontramos con uno de los palacios más bellos que ver en Braga.

El Palacio Raio fue levantado a mediados del siglo XVIII, como un encargo hecho por João Duarte de Faria, un rico comerciante y caballero de la Orden de Cristo.

Su fachada llamará tu atención en cuanto te acerques, pues se encuentran revestidas con azulejos azules, que contrastan con las elegantes tallas de granito en las puertas y los marcos de las ventanas.

El palacio está al lado del hospital de Braga y en su interior hay un museo gratuito con algunos artefactos médicos antiguos, así como información sobre el edificio y su reciente restauración.