Copenhague ofrece una gran variedad gastronómica por sus calles. Recientemente la ciudad puede presumir de tener el mejor restaurante del mundo; el Moma, que desbancó al famoso Bulli de Ferran Adrià de su trono el año pasado. No obstante, también existen restaurantes en Copenhague donde comer alejados de la química a precios asequibles.
No nos engañemos. Cenar con vino en los países nórdicos no es barato en comparación con cualquier país de habla hispana. Sin embargo, también tenemos la opción de la cómida rápida. Existen multitud de lugares por la ciudad donde ofrecen kebabs, sandwiches aunque la comida rápida favorita entre los daneses es el arenque y lo veréis en muchos locales por la calle.
De todas maneras, no os asustéis. Existen restaurantes de buena calidad por la ciudad donde podremos comer de maravilla con vino incluido por una media de 30 a 40 euros por cabeza. Sin duda, para alguien que supera los 45,000 euros anuales como la mayoría de daneses es una auténtica ganga.
Entre los que visitamos destaco los siguientes:
Madklubben, Pilestrade 23
Atención: estás entrando en uno de los lugares sagrados de Copenhague si eres un amante de los bistecs y el solomillo. La ternera danesa es de alta calidad y puede comprobarse en este restaurante de ambiente joven y moderno. Se trata de una cadena de tres restaurantes en Copenhague que está teniendo un gran éxito recientemente. Un menú de tres platos con vino incluido os saldrá por unos 35 euros. Los camareros son encantadores y el local ofrece un agradable estilo. Aunque tengas la barriga a reventar después del solomillo trata de dejar espacio libre para probar los postres; el mousse de chocolate es espectacular.
Café Europa, Amagertorv 1
Tanto si quieres desayunar bien o matar la mañana y tarde con un buen brunch el café Europa es una opción excelente. Se encuentra en una plaza céntrica de la ciudad con una fantástica terraza donde disfrutar del sol si tienes la misma suerte que yo tuve. Por 90 coronas podrás tomar un buen desayuno y por 170 podrás disfrutar de un espectacular brunch que incluye de todo: salchichas, verduras, fruta, huevos y mucho más.
Paté Paté, Slagterboderne, 1
En el barrio de Vesterbro encontrarás este precioso bar de vinos deliciosamente decorado y con un piano en su interior. Ofrecen delicatessen así como tapas incluyendo ostras, mejillones y otros productos comprados directamente de los pescadores locales. Tiene mesas en el interior y en la terraza. Buen ambiente y muy cerca se encuentra la zona de copas de Meat Packing District donde tomar las últimas copas.
Les trois cochons, Vaemedamsvej 10
Se encuentra en mi calle preferida de Copenhague. Floristerias, chocolaterías, cafés, terrazas y una arquitectura elegante sitúan a este restaurante en un lugar ideal que bien podría estar ubicado en algún rincón oculto del centro de París. El restaurante es francés y se levanta en una antiguo matadero. Han sabido mantener el estilo de paredes blancas y sobrias del antiguo establecimiento con un elegante contraste de macizas mesas de madera. Ofrecen un menú diario a precios razonables. Aunque no se tratara de un plato típico danés me decidí por probar las ancas de rana y, ¡no me equivoqué en absoluto!