Durante mis viajes por Islandia, en varias ocasiones me sentí como si estuviera en otro planeta. Tal es la experiencia que te crean esos paisajes tan extraños, en los que la desolación volcánica y glaciar esculpe la tierra de una manera totalmente extraterrestre. Sin embargo, muchos de esos paisajes los contemplé de lejos, sin poder acercarme a ellos. No ocurre así en el área geotérmica de Leirhnjúkur, también conocida con el nombre de área geotérmica de Krafla. Una visita a Leirhnjúkur te permite caminar sobre grandes extensiones de lava solidificada, aún humeante, aunque hayan transcurrido casi cuatro décadas desde la última vez que corrió en estado líquido por esos vastos campos irregulares.
Esta es una de las mejores experiencias – y la mejor ruta de senderismo – que puedes vivir en el lago Mývatn, una de las zonas de mayor actividad geotérmica de Islandia.
Tras haber caminado por este campo de lava en cuatro ocasiones durante el verano pasado – gracias a mi trabajo como guía de viajes en el país -, aquí te dejo mi experiencia. En mi modestia opinión, visitar Leirhnjúkur es un auténtico imprescindible en el norte de Islandia.
Índice de contenidos
Cómo llegar a Leirhnjúkur
Antes de comenzar a contaros la experiencia de mi visita a Leirhnjúkur, vamos con un poco de logística.
Para poder visitar esta increíble área geotérmica tendrás que viajar al norte de Islandia, más concretamente a los alrededores del lago Mývatn, alrededor del cual existen tantas atracciones turísticas que se ha convertido en el lugar más visitado de esta parte de la isla.
Para llegar al aparcamiento de Leirhnjúkur necesitarás un coche o caravana propia, pues no hay ningún servicio de transporte público que te lleve hasta el lugar. Para ayudarte con ello puedes leer mis consejos sobre alquiler de coches en Islandia y alquiler de caravanas y furgonetas en Islandia.
La población más cercana es Reykjahlid, a unos 20 minutos en coche. Sin embargo, el alojamiento es muy escaso en la zona y muchos de los viajeros que visitan Leirhnjúkur lo hacen partiendo de las ciudades de Akureyri (a 1 hora y 20 minutos, y ciudad más importante del norte de Islandia) y Húsavik (algo menos de una hora).
En mi opinión, y si vais dando la vuelta a la isla viniendo del sur, me quedaría la noche en Húsavik y madrugaría para visitar Leirhnjúkur y las otras muchas atracciones del Mývatn en un solo día, antes de regresar a Húsavik o seguir hacia el oeste y descansar en Akureyri.
Cuánto tiempo necesito para visitar Leirhnjúkur
El área geotérmica de Leirhnjúkur puede explorarse bastante bien en un par de horas. Sin embargo, hay gente que se queda absolutamente atrapada por ese paisaje apocalíptico tan difícil de encontrar en otros puntos del planeta y alarga su estancia.
Si estás aprovechando el día para ver todas las atracciones del Mývatn, te aconsejo que te ciñas a las 2 horas, pues tendrás que apurar el día al máximo para que te alcance para disfrutar de todo. Y es que aunque en mi trabajo siempre visito el lago y sus alrededores en un día, lo cierto es que si hiciera el viaje por mi cuenta quizás me quedaría un par de jornadas, para ver todo con la parsimonia que se merece.
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Cómo se formó el área de Leirhnjúkur
En el aparcamiento de Leirhnjúkur hay un pequeño tablón en el que se explica cómo se formó ese bello y enigmático lugar.
Los campos que rodean al lago Mývatn han sido arrasados por la lava en una gran cantidad de ocasiones. Así, los castillos de lava de Dimmuborgir se formaron hace 2.500 años y el cráter de Hverfell hace 2.300 años. Sin embargo, esta lava solidificada que aún hoy humea proviene de las erupciones de la montaña Krafla, conocidas como los Fuegos del Krafla. Este fenómeno tuvo lugar entre 1975 y 1984, cuando la lava fue vertiéndose por las fisuras de la tierra durante nada menos que 9 años seguidos.
Seguro para viajar a Islandia
¿Eres de los que todavía piensa que un seguro de viaje es algo prescindible? Pues tras trabajar de guía en Islandia, te puedo asegurar que muchos de mis viajeros se alegraron de estar asegurados tras sufrir caídas, torceduras y accidentes con crampones. Y es que en un viaje de aventura como éste (y con un sistema sanitario tan caro como el islandés), más vale ir con paz mental y contratar un seguro. Yo siempre he confiado en la compañía IATI, y me ha ido genial, respondiendo a la perfección cuando los necesitas. En Islandia te puede venir bien su seguro para mochileros, que cubre gastos sanitarios de hasta medio millón de euros, repatriación y mucho más. Y por poco más de 3 euros diarios. Además, tienes un 5% de descuento al venir de nuestra parte a través de este enlace.
El anterior suceso parecido había ocurrido en 1724 y 1729, y se le llamó los Fuegos del Mývatn.
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Esa lava fue expulsada por distintas bocas (este es un volcán de fisura) y arrasó los campos de la zona.
Hoy en día, se puede caminar por un espectacular campo de lava de unos 10 km de largo y 2 km de profundidad, pareciendo que te encuentras en un lugar como Marte o similar.
Cómo es la visita a Leirhnjúkur
Dejé la furgoneta en el aparcamiento y comenzamos a caminar por un sendero ancho y sencillo (con algo de piedras y tierra) que nos conducía al campo de lava grisáceo de Leirhnjúkur y una colorida colina en cuya ladera aparecían fumarolas y pozas de sulfuro.
A ambos lados del camino aparecía el famoso musgo islandés – al cual se atribuyen varias propiedades curativas y benignas para la piel, y se halla protegido por las autoridades islandesas – y algunos arbustos de plantas y flores.
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Al poco, el camino llegaba a una zona fangosa por lo que se ha construido una pasarela de madera por la que te aconsejo caminar si no quieres hundir tus botas de trekking en ese barro traicionero. Eso sí, la rampa se encuentra en mal estado (por lo menos en otoño del 2021) y a veces es la parte más peligrosa del recorrido. Te recomiendo que mires al suelo en este tramo.
La pasarela de madera finaliza en un bonito mirador que da a las coloridas pozas y fumarolas, así como a la llanura que rodea el campo de lava y a la extraterrestre extensión de Leirhnjúkur. Sin embargo, aunque la foto aquí es buena, tendrás la opción de conseguir mejores panorámicas desde puntos más elevados de la ruta.
Aquí, el camino se interna en el campo de lava. Lo encontrarás señalizado con palos y te aconsejo que no te desvíes de él, pues las rocas y la lava solidificada aún siguen conservando temperaturas muy altas y si pisas durante un tiempo largo en el lugar equivocado puedes notar cómo comienza a derretirse la suela de tu zapatilla o bota. No es broma.
La senda realiza un zigzag por Leirhnjúkur, regalándote unas vistas apocalípticas espectaculares, tanto al campo de lava por el que caminas como a los valles, cráteres, magma y fumarolas de alrededor. Un lugar que es complicado describir, pues tienes que vivirlo para entenderlo.
A esa sensación de estar en otro planeta ayuda mucho el humo que emana de las fisuras de la tierra, de la roca… De todos lados. La zona sigue siendo incandescente a cierta profundidad, y hay lugares en los que ese calor se nota en la superficie (lo notarás al pasar junto a esos puntos).
Descubrirás algunos pequeños tubos volcánicos (por los que fluyó la lava durante un tiempo, pero que al secarse se quedan huecos y, finalmente, colapsan), cráteres de diferentes tamaños y piedras y rocas realmente bellas (no te puedes llevar ninguna a casa, recuérdalo).
Realizar el circuito largo lleva un par de horas (unos 5 km), contando con las numerosas paradas que querrás hacer para tomar fotografías y demás.
Cuándo es la mejor época del año para visitar Leirhnjúkur
El verano y principios de otoño son las mejor época para visitar Leirhnjúkur. La zona con lluvia pierde mucho, pues la luz del sol arranca unos colores espectaculares al paisaje y, sobre todo, el agua vuelve más complicada para caminar por ella.
En invierno, hay que sumarle la dificultad de ver los palos señalizadores cuando las nevadas arrecian, pudiendo acabar pisando donde no debes.
Qué equipo tengo que llevar para visitar Leirhnjúkur
No se necesita un equipo especial para visitar Leirhnjúkur. Simplemente, necesitarás unas buenas botas o zapatillas de senderismo que te sujeten bien los tobillos, dada la gran irregularidad del terreno una vez te adentras en la zona volcánica.
Algunos de mis clientes quisieron usar también palos de trekking porque les daba una mayor seguridad. Si realizas la excursión durante un día soleado, no olvides llegar agua, protector solar, gorra y gafas de sol. No suele hacer calor en Islandia, pero el sol quema la piel aún más que en España.
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