Durante esta semana he disfrutado de cinco maravillosos días explorando la zona de la Laponia sueca. Si bien es cierto que no he salido de Europa y me encontraba en uno de los países más avanzados del viejo continente, he vivido situaciones que no esperaba encontrarme. El impacto turístico en zonas remotas de la Laponia sueca es mínimo y a veces nulo. Es curioso ver que los habitantes de esta región parecen tener la autoestima un poco minada e incluso se sorprenden y te preguntan qué hace un español de viaje en un lugar tan aislado del mapa turístico de Europa.
En algunos momentos he recordado anécdotas de viaje por pueblos remotos de montaña en Asia, como el día en que le hice una foto a un niño y le enseñé el resultado y se sorprendió al verse por primera vez reflejado en una cámara. Laponia sueca contiene zonas muy poco exploradas que no salen en los mapas ni en las guías. Sin duda, sorprende ver eso en un país avanzado donde pagas un botellín de agua con tarjeta y puedes pasarte todo el viaje sin pasar por el cajero.
Unos cuantos tópicos que aplicamos comúnmente a la región de Laponia y debemos desmitificar:
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Laponia no es solo Finlandia
Laponia no es solo Finlandia. La región que cubre el círculo polar ártico es extensa y abarca los países de Noruega, Suecia, Finlandia y Rusia. El país finlandés, sin duda, va en cabeza promocionando el destino y ofrece una variada carta que a veces puede llegar a resultar un poco abusiva y, en cierta manera, artificial (véase el parque temático dedicado a Santa Claus en Rovaniemi). Con eso, la mayoría olvida otros lugares remotos de Laponia que merecen la pena visitar si buscas autenticidad en tus viajes.
En Laponia no hace tanto frío
Las temperaturas en Laponia no son de 30 grados bajo cero durante todo el año. En estos cinco días el sol ha brillado sin apenas nubes y las temperaturas han rondado entre los 0 o 5 grados durante el día. El mar está helado así que el clima es seco y si vas bien abrigado -guantes, botas, bufanda, camiseta térmica, forro polar y cortavientos- puedes disfrutar de la nieve durante horas sin problemas. El país se cubre de nieve desde octubre hasta mediados de abril ofreciendo un contraste único según la época del año que escogemos para viajar. En primavera empieza el deshielo, el verde aflora y los múltiples lagos ofrecen un paisaje completamente distinto a una temperatura que durante julio y agosto ronda los 20 y 25 grados.
Laponia en familia
Al contrario de lo que pensamos, Laponia no sólo es un destino exclusivo para aventureros y audaces fotógrafos en busca de naturaleza extrema y la perfecta aurora boreal. También puede ser un destino ideal para visitar en familia. Sabemos que la climatología puede ser un factor determinante cuando nos acompañan los pequeños pero si evitamos los crudos meses de invierno, no hace tanto frío y se disfruta de muchas horas de sol. Asimismo, la región ofrece múltiples actividades que los niños disfrutarán de lo lindo: pesca en hielo, karting sobre lagos helados, una variada fauna que apreciamos a pie de carretera con renos, alces y otros animales, patinaje sobre hielo, trineos con perros o excursiones en motonieve.
En Laponia no todo es salmón
No están todo el santo día comiendo salmón. Eso se lo dejamos a los vecinos noruegos. En la Laponia sueca he comido más carne que pescado. Suculentos solomillos de alce y reno han pasado por mi estómago acompañados de verduras y suculentas salsas con frutas silvestres exclusivas de la zona.
Laponia y Suecia no son tan caras
Los precios en pueblos remotos de Suecia nada tienen que ver con los que vamos a encontrar en Estocolmo. Olvidémonos del tópico de los 80 y 90 cuando los precios en los países nórdicos triplicaban el coste de vida de la España de la peseta. Cualquiera que viva en las grandes ciudades de la península ibérica encontrará la Laponia sueca algo más barata que los precios habituales en casa. Dobles por 80 euros, suites con terraza y sauna en la habitación por 130 euros o menús del día por 8 euros.
La cultura sami en Laponia
Si bien es cierto que el mayor reclamo en la Laponia sueca es su virgen naturaleza, no solo vamos a encontrar paisajes nevados, renos y carreteras al estilo canadiense. La cultura es otro reclamo interesante en la región. Los samis han habitado durante siglos en Laponia y dan vida y significado a la naturaleza que nos rodea y habla. Como cualquier pueblo ignorado por la historia, si muestras tu interés por conocer su cultura, te recibirán con los brazos abiertos.
Durante los próximos días pasearemos por Laponia sueca a través de los lugares que he visitado. Espero poder transmitir las singulares sensaciones experimentadas y os ofrezca una alternativa de viaje en vuestras próximas decisiones vacacionales.
Enhorabuena por los artículos sobre la Laponia sueca. Yo soy de Barcelona, vivo desde hace3 un año y medio en Suecia, Karlstad, concretamente y me ha encantado tu perpectiva de Laponia.
saludos
Javier
jeje la verdad es que ha sido un tremendo viaje!
Quiero alegrarme por tu viaje pero la envidia no me deja aun… respiro poco a poco…
Muero de ganas por leer las entradas laponas!