Tioman es una isla que se encuentra a unos 40 kilómetros de la costa sureste de la Malasia peninsular. Ya os conté en otro artículo sobre la belleza del mundo submarino que rodea la isla de Renggis, a unos metros de costa de Tioman.
Pero Tioman no es sólo Renggis.
Sin embargo, antes de comenzar a describirte las bellezas de la isla, te diremos cómo llegar.
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Cómo llegar a la isla de Tioman
Para llegar a la isla de Tioman hay que tomar un ferry que parte del puerto de Mersing.
Yo me encontraba en la capital de Malasia y tomé un bus de Kuala Lumpur a Mersing. Para encontrar los mejores precios y disponibilidades de horarios y flotas, os recomiendo usar el portal líder en Malasia de venta online de billetes de autobús: BusOnlineTicket.com. Además, a través de esta web, también puedes reservar billetes de tren y hoteles en todo el país.
El trayecto de Kuala Lumpur a Mersing lleva unas 5 horas. La mayoría de las veces no llegas a tiempo para conectar con el ferry que te lleva a Tioman. Si es así, puedes hacer noche en cualquiera de los hoteles de la ciudad y tomar el primer barco de la mañana. El bote realiza varias paradas y tarda unas 2 horas y media en llegar a Tioman.
La isla de Tioman
La mayoría de las playas habitadas se encuentran en el lado Oeste de la isla, siendo Juara la única en el lado Este.
Nosotros conocimos Tekek, ABC -donde nos alojamos- y Juara en los 4 días que pasamos allí.
Tekek
Tekek es el pueblo principal de la isla y tiene hasta una pequeña pista de aterrizaje para los vuelos procedentes de Singapur y Kuala Lumpur con Berjaya Air. Lo gracioso del tema es que el pueblo cuenta con varias tiendas Duty Free donde puedes encontrar la cerveza más barata que el agua. La playa es una pequeña franja de arena en las cercanías del pueblo pero es bastante mejor en la zona del Berjaya Resort, que con sus bungalows de lujo a precios elevados es el más alto standard que se puede encontrar en casi toda la costa Oriental. Además la playa del Berjaya sirve de lanzadera para las excursiones a la Renggis Island e incluso puedes nadar de allí hasta ella.
La playa de ABC
A unos 20 minutos caminando hacia el Norte desde Tekek se ecuentra la playa ABC. Allí fue donde nos alojamos las 4 noches en un pequeño bungalow con baño propio y ventilador por 30 RM la noche. Para buscar alojamiento os recomiendo reservar con antelación si vais en período vacacional o fin de semana porque Tioman es bastante famoso para los turistas locales y los de Singapur. Si no, la única opción es patearse la playa en busca de la ganga. Nosotros tuvimos bastante suerte.
La playa de ABC tampoco es la quinta maravilla de la naturaleza pero su agua es cristalina y llena de vida, como casi toda la isla. Además hay un par de chiringuitos de playa que animan la tarde-noche y podéis ver pasar monos y unos lagartos enormes con cierta regularidad.
Pasamos un par de días en distintos lugares de la playa y nos tiramos casi todo el tiempo en el agua donde pudimos ver rayas, multitud de peces de colores e incluso un bebé de tiburón muerto en el fondo del mar. Nos dedicamos a descansar y comer bien. El único pero importante es el tema de las malditas sandflies. De menor tamaño que sus hermanas neozelandesas son, sin embargo, tan molestas como las otras. Sus picaduras dejan unos bultos mucho peor que los de los mosquitos y pican el doble. Nos rascamos como locos y las heridas tardan en curarse.
La playa de Saladan
La siguiente playa hacia el norte es la de Saladan. En la Lonely Planet la describían como una fiesta continua y pasamos de ir. Apostaría 1.000 Euros a que no había nada de marcha en la época que fuimos porque no era temporada alta y la cosa andaba bastante tranquila por todas partes excepto por el par de días del puente del Día del Trabajador, cuando se llenó la isla con turistas locales.
La playa de Juara
La playa de Juara en sí tampoco nos gustó demasiado. Si ya has visto las de Tailandia, Filipinas u otros países de la zona, no te impresionará. Lo que sí os recomiendo es el camino que lleva a ella desde ABC o Tekek.
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Nosotros salimos a las 7.30 de la mañana de nuestro bungalow con una mochilita con la cámara, agua, toalla y poco más y caminamos hasta el comienzo de la senda a Juara. La primera hora y cuarto del trekking se desarrolla por una zona de selva preciosa. A esas horas y en esas fechas no encontramos a una sola persona en la jungla. Fue mejor que la que vimos en trekkings en Tailandia, Laos o Myanmar. Gusanos coloridos de 40 centímetros, lagartos de colores, hormigas gigantes, mariposas preciosas y monos que nos chillaban desde las ramas altas de los árboles hicieron el trekking de lo más entretenido. Algunos de los árboles tenían raíces más grandes que cimientos de edificios. El día salió nublado y la temperatura era agradable. Si lo hacéis un día soleado os aconsejo que salgáis lo más pronto posible porque el calor en la isla es realmente duro.
Tras salir de la jungla tuvimos que caminar por otros 50 minutos a lo largo de una carretera que es utilizada por los que prefieren contratar el servicio de 4×4 para llegar a Juara.
La vida submarina de las aguas de Juara es mucho más pobre que en ABC aunque dicen que es buena para el surf -no el día que fuimos al menos- y en su extremo Sur hay un centro de ayuda a las tortugas marinas. Las sandflies también andan por aquí.
Nos quedamos apenas una hora en la playa y decidimos volver a nuestra querida ABC. Como unos campeones nos hicimos la vuelta de nuevo andando y llegamos a tiempo para ver el atardecer.
Creo que, independientemente de la playa en que os alojéis, Tioman os va a encantar y tenéis que pasaros por allí unos días si estáis visitando Malasia.
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