Las 10 mejores cosas que ver en Brujas

Brujas es una de esas ciudades de cuento que, al regresar a casa, siempre resulta complicada de describir a los amigos. Un lugar de los que te deja maravillado y una de las mayores atracciones turísticas que encontrarás en Bélgica. Si no te lo crees, sólo tienes que leer este artículo en el que te contamos cuáles son algunas de las mejores cosas que ver en Brujas.

Así, te vamos a ir descubriendo, entre tranquilos canales, casas de corte medieval, antiguos hospitales, museos, tiendas de bombones y chocolate, cervecerías, hermosas plazas llenas de vida y mucho más, una ciudad que quedará grabada a fuego en tu memoria viajera.

A poco más de una hora en tren de Bruselas, Brujas supone una escapada ideal para un día, pero te recomiendo que pases al menos una o dos noches en la ciudad para disfrutar a fondo de lo mucho que tiene que ofrecer.

1. Visita el Muelle del Rosario (Rozenhoedkaai)

Para tener una primera toma de contacto con las mejores cosas que ver en Brujas, te recomiendo que te acerques a conocer el Muelle del Rosario, también conocido con el «sencillo» nombre local de Rozenhoedkaai.

El lugar es, sin duda, uno de los más fotografiados de la ciudad. De hecho, parece la composición de un cuadro, con las aguas del canal, los bonitos edificios de aspecto medieval tocando esas aguas y ese halo de tranquilidad romántica que lo envuelve todo.

El muelle marca el lugar donde se unen los canales Groenerei y Dijver y también sirve como punto de partida para la mayor parte de las excursiones en barco por los canales de Brujas.

2. Diviértete en la Plaza del Mercado de Brujas (Markt Square)

La histórica plaza del mercado de Brujas posee muchas hermanas parecidas en el Viejo Continente. Se trata de una hermosa plaza abierta rodeada de hermosos edificios de coloridas fachadas, cafés, restaurantes y, no vamos a engañarte, muchos, muchos turistas.

La mayoría de las casas gremiales que rodean la plaza y ofrecen maravillosas vistas no son originales sino que se basan en los diseños ancestrales de las que alguna vez estuvieron allí.

Los puntos más notables de la plaza son el imponente edificio neogótico Provincaal Hof y el Café Craenenberg, donde Maximiliano de Austria estuvo encarcelado en 1488.

3. Prueba el auténtico chocolate belga

Dicen de Bélgica que, con el permiso de Suiza, es el país del chocolate y los bombones. Pues bien, Brujas es la capital de ese dulce país. Por lo tanto, probar auténticos bombones belgas es una de las mejores cosas que hacer en Brujas.

Un buen lugar para hacerlo es The Chocolate Line. Se trata de una fábrica de chocolate familiar que se encuentra en el centro de la ciudad. En ella, los aficionados al chocolate, Fabienne y Dominique, junto con su hijo Julius, elaboran deliciosos productos artesanales mientras apoyan la sostenibilidad y los proyectos sociales. Visítalos para ver (y probar) cómo se hace su chocolate y sus magníficos bombones. Están de puro vicio.

Si prefieres probar otro lugar o llevarte un regalo insuperable a casa, Pralinette o Oliver’s Chocolate son también muy buenas opciones.

4. Disfruta de la panorámica de la Torre del Campanario de Brujas

Si quieres disfrutar de una de las mejores vistas que ver en Brujas, tendrás que subirte a la torre del campanario (Belfort van Brugge).

El campanario de Brujas es un campanario medieval realmente impresionante (con ciertos toques de la Torre Oscura de Mordor que imaginó Tolkien). Construido alrededor de 1240, posee una altura de 83 metros y alberga 47 campanas que aún funcionan hoy en día.

Te aconsejo que hagas el esfuerzo y asciendas los 366 escalones que llevan a su parte más alta. Así podrás disfrutar de las mejores vistas panorámicas de la ciudad. Los precios rondan los 10-12 € por persona.

5. Visita la iglesia de Nuestra Señora

La Iglesia de Nuestra Señora (o Onze-Lieve-Vrouwekerk) data del siglo XIII y es más conocida por ser el hogar de la estatua de la Virgen y el Niño, creada por Miguel Ángel, que atrae a visitantes de todo el mundo.

La pieza fue la única de Miguel Ángel que salió de Italia mientras el artista aún vivía. Hay varias otras obras de arte menos conocidas pero igualmente impresionantes en la iglesia que datan principalmente del siglo XV.

Las tumbas de Carlos el Temerario y su hija están talladas en bronce y piedra y también son dignas de ver.

6. Disfruta del arte en el Museo Groeninge

Si te gusta el arte, debes incluir el Museo Groeninge en tu lista de mejores cosas que ver en Brujas.

El Museo Groeninge fue construido en el sitio de la abadía medieval de Eekhout. En su interior encontrarás algunas de las mejores obras producidas durante los siglos de esplendor del arte belga y europeo. Desde obras de los grandes artistas flamencos, como Jan van Eyck, Hans Memling y Gerard David, hasta el arte moderno del siglo XX de René Magritte. También podrás encontrar importantes obras de maestros renacentistas y barrocos en una de las colecciones de arte más bellas y diversas del mundo.

7. Aprende la historia de la cerveza belga en la destilería Halve Maan

Si eres un amante de la cerveza, definitivamente deberías visitar la cervecería Halve Maan que data de 1856.

Esta destilería, también conocida como la cervecería Half Moon, es una de las más tradicionales que ver en Brujas…¡Y en Bélgica!. Aquí puedes aprender el proceso completo de elaboración de la cerveza haciendo un recorrido por sus instalaciones. Y, por supuesto, también podrás probar sus distintas clases de cerveza.

Dos de sus elaboraciones famosas es BrugseZot y Straffe Hendrik Beer, totalmente históricas y famosas por su sabor. Estos recorridos suelen ser muy interactivos y entretenidos, por lo que podrás hacerle preguntas al cervecero sobre cualquier tema relacionado con ese líquido celestial.

8. El hospital de San Juan, uno de los mejores lugares que ver en Brujas

Tranquilo, que no estamos diciendo que tengas que acabar en el hospital en Brujas.

Este no es un hospital ordinario, el Museum St Janshospital es un hospital restaurado del siglo XII con vigas de madera en el techo y obras de arte que datan del siglo XV.

El relicario de roble, en todo su esplendor dorado, es la pieza más famosa del museo y fue elaborado por Hans Memling. La pieza cuenta la historia del casamiento de Santa Úrsula con un príncipe pagano. Úrsula, junto con 11.000 vírgenes, fue asesinada camino a Roma por el rey de los hunos.

La entrada al museo cuesta 12 euros para adultos e incluye la entrada a una farmacia tradicional del siglo XVII.

9. Diviértete y aprende en el museo interactivo de Historium

Historium es uno de los mejores lugares que ver en Brujas, sobre todo si viajas en familia.

Situado en un hermoso edificio neogótico cerca de la plaza del mercado de la ciudad, el único objetivo del museo es llevar a los visitantes a la Brujas medieval a través de un recorrido de audio y vídeo de una hora.

La precisión histórica (o la falta de ella) y la falta de hechos hacen que esta sea más una experiencia emocionante para los niños y las familias que una experiencia de aprendizaje sobre la ciudad y su historia medieval.

10. Admira el Ayuntamiento de Brujas y la Basílica de la Santa Sangre en la plaza del Ayuntamiento (Burg)

El Stadhuis de Brujas, el ayuntamiento, es un edificio verdaderamente impresionante que data de principios del siglo XV. Las torres y las ventanas ranuradas de la fachada del edificio rezuman belleza gótica.

También hay una serie de estatuas de ex condes y condesas de Flandes. Si quieres aprender todo sobre el lugar, te recomiendo que tomes una de las audioguías que te ofrecerán a la entrada.

Si pensabas que el edificio se veía bien desde el exterior, espera a ver el techo y los murales dentro de la sala gótica. Te quedarás sin palabras.

En la plaza donde se encuentra el Stadhuis (la plaza Burg), también podrás admirar la belleza de la Basílica de la Santa Sangre, donde, según cuenta la leyenda, se halla un vial que encierra un pedazo de tela que fue manchada con la sangre de Jesús.