Más de dos milenios han pasado desde que el poderoso emperador romano Octavio Augusto dio la orden de construir una bonita y gran ciudad que sirviera de retiro y reposo a los valientes legionarios romanos que ya habían dado lo mejor de sí mismos en los muchos campos de batalla que había bañado con sangre aquella atrevida Roma. Aquellos soldados eméritos descansarían en los baños, foros, avenidas y domus de la que fue bautizada como Emerita Augusta. Hoy en día, entre las muchas, e interesantes, cosas que ver en Mérida destacan las ruinas de aquella ciudad romana. Sin embargo, también los visigodos y árabes dejaron su huella en la capital extremeña que, no sin razón, pasa por ser una de las más bellas ciudades de España.
Hoy en día, Mérida es una ciudad pequeña y hospitalaria, a caballo entre Portugal y España, con una población de unos 60.000 habitantes y mecida apaciblemente por las aguas de los ríos Guadiana y Albarregas. El sector servicios es su principal motor económico, siendo el turismo una fuente de ingresos muy importante. Y es que caminar por las románticas calles de emeritenses te transporta, ineludiblemente, a tiempos pasados. Un lugar en el que perderte, tanto física como cronológicamente.
Para poder descubrir los muchos secretos que ver en Mérida, deberás pasar aquí al menos 3 o 4 días, pudiendo así, además, realizar alguna escapada a sus interesantes alrededores, donde te esperan bellos paisajes y pueblos con encanto. Si has decidido viajar a Mérida, sin embargo, merece la pena conocer algo de su historia. Así, después entenderás mejor todo aquello que verás en la ciudad.
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Breve historia de Mérida
Fundada como colonia romana en el 25 a. de C., Mérida se convirtió pronto en una de las ciudades más importantes del oeste de los dominios del Imperio Romano. Fue así como se convirtió en capital de la provincia romana de Lusitania (actual Portugal). Acueductos, lujosas domus (casas romanas), anfiteatros, hipódromos, templos, plazas… Emerita Augusta lucía hermosa durante unos tiempos de bonanza que se prolongarían hasta las invasiones bárbaras del siglo V.
Sin embargo, el paso a manos visigodas no menguó el poder de la ciudad. En el siglo VI, Mérida fue declarada capital de la Hispania visigoda, antes de que lo fuera Toledo.
Ya en el año 713, los musulmanes venidos de África acabaron con los visigodos y tras varios levantamientos mozárabes contras las autoridades califales, Mérida cayó en un lento declive que duraría hasta la Reconquista cristiana (1230). Ya en la época de la conquista americana saldrían de aquí varios exploradores y capitanes de renombre, mientras que durante la ocupación francesa su patrimonio se vería expoliado.
Producto de todos estos vaivenes de culturas e imperios, Mérida puede presumir hoy en día de poseer un conjunto arqueológico que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO (1993). Desde entonces, el turismo ha sido clave en el desarrollo de la capital extremeña.
Dónde dormir en Mérida
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Las mejores cosas que ver en Mérida
Cuando disfrutes de las mejores cosas que ver en Mérida, entenderás por qué son tantas las personas que la visitan cada año. Para una primera visita a la ciudad, estos son algunos de los imprescindibles:
1. Teatro Romano
Para casi todas las personas que visitan la ciudad, el Teatro Romano es la joya más preciada que ver en Mérida.
El teatro es la estrella, junto al anfiteatro, de las ruinas romanas de la antigua Emerita Augusta. Para no faltar a la verdad, hay que reconocer que lleva unas cuantas operaciones de «lifting» más que el anfiteatro, pero lo cierto es que se agradece, pues su aspecto hoy se asemeja en gran medida a cómo debió lucir cuando este lugar monumental se levantó por orden de Marcus Agrippa -general romano y yerno del emperador César Augusto -, alrededor del 15 a. de C.
El Teatro Romano de Mérida fue diseñado para albergar 6.000 almas y estaba divido en grupos de gradas. Los asientos más cercanos – las 22 primeras filas – estaban reservados a los miembros de las clases más pudientes.
Aquí se representaban todo tipo de obras que ocasionaban el deleite de los antiguos lusitanos. La parte trasera del escenario sigue siendo espectacular, con sus columnas corintias y las estatuas de mármol.
Sin embargo, lo más fascinante de todo es que más de dos mil años después, el Teatro Romano de Mérida sigue cumpliendo la labor para la que fue erigido: entretener y traer el arte a los emeritenses. Si quieres comprobarlo, solo tienes que acudir en los meses de julio y agosto, cuando tiene lugar el Festival de Teatro de Mérida. Durante esas semanas las viejas piedras romanas vuelven a sentir la vibración de las comedias y dramas griegos, así como de la música y las pisadas de los bailarines de danza. Algo realmente emocionante.
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2. Anfiteatro de Mérida
Y si bien es cierto que el Teatro Romano es el lugar más espectacular que ver en Mérida, también lo es que el Anfiteatro no se queda muy rezagado.
Levantado alrededor del año 8 a. de C., aquí gritaban, sudaban, luchaban y morían valientes gladiadores ante una audiencia de unas 15.000 almas enfervorecidas. Las gradas tienen forma ovalada y, como solía pasar en todos los espectáculos romanos, los asientos de la plebe estaban separados de los de los nobles. El anfiteatro está en ruinas, siendo la sección mejor conservada la que albergaba a los gladiadores antes de salir a la arena. Y es que en el siglo V las piedras del anfiteatro comenzaron a ser utilizadas para levantar otras construcciones en la ciudad.
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3. Templo de Diana
El único edificio religioso que queda en pie de la antigua Emerita Augusta es el Templo de Diana. Además, se encuentra aún en el mismo lugar en el que se construyó.
Cada lado del templo está sostenido por seis milenarias columnas de estilo corintio. En uno de ellos, aún quedan restos del frontal. Dicen los historiadores que fue levantado duran el siglo I, y que, probablemente, en él se hacían ofrendas al emperador César Augusto y no a la diosa Diana (diosa virgen de la caza, protectora de la naturaleza y la Luna). Prueba de ello es que aún hay esculturas del emperador y su familia en el templo y sus alrededores.
Si, al visitar el templo de Diana, notas algo que no encaja con la época romana, es porque, en el siglo XVI, un conde decidió construir su palacio en el centro del templo. Un despropósito que sigue visible hoy en día.
4. Circo Máximo (Circus Maximus)
Otro de los monumentos que forman parte del impresionante legado romano que ver en Mérida es el Circus Maximus. Se trata de un antiguo hipódromo – con un circuito de unos 400 metros – al que la gente acudía para disfrutar de las carreras de caballos y cuádrigas. Tenía capacidad para algo más de 25.000 personas y se encuentra en buen estado de conservación, manteniendo algunas partes de la estructura original, como la puerta triunfal y el lugar en el que se ubicaban los jueces.
5. Puente Romano de Mérida
El Puente Romano es otra de las maravillas que ver en Mérida, y una construcción que tiene el honor de poseer un récord mundial. Y es que afirman que se trata del puente romano – que sobrevive en buen estado – más largo del mundo. Con una longitud de 70 metros, fue levantado, sobre las aguas del río Guadiana, en el 25 a. de C.
Los materiales empleados en la construcción eran de primerísima calidad, con sólidas piedras rectangulares que han podido resistir inundaciones, vientos y lluvias hasta nuestros días. Actualmente, el puente cuenta con 60 arcos (el original tenía 62) y es peatonal desde 1993. Cerca de la plaza de España es un buen lugar para dar un paseo y sentir la Historia bajo tus pies.
6. Acueducto de los Milagros
Si eres un admirador de la tecnología de construcción romana, el Acueducto de los Milagros se debe encontrar en los puestos nobles de tu lista de mejores cosas que ver en Cáceres.
Esta magnífica estructura de 10 km de largo fue construida para poder proveer de agua a Emerita Augusta. El líquido elemento se traía desde la cisterna de Proserpina, situada a unos 5 km de la ciudad. El agua era transportada por el acueducto hasta un gran depósito cuadrado llamado castellum aquae. Sus arcos – utilizados para compensar los desniveles del terreno – han sobrevivido al paso del tiempo para quedar como auténtico testimonio de la increíble ingeniería hidráulica romana.
Si te gusta la fotografía, pásate por aquí una hora antes del atardecer, pues es uno de los mejores lugares de Cáceres para ver una puesta de sol.
7. Alcazaba de Mérida
Perfectamente integrada con las ruinas romanas, se halla la pieza principal del legado árabe que ver en Cáceres. La Alcazaba de Mérida se encuentra justo en el extremo norte del puente romano. Construida por los árabes en el 835, te da el mejor punto de vista posible sobre el puente. La fortaleza – que fue construida en este emplazamiento estratégico para dominar la entrada por el Guadiana y regular el tráfico de mercancías por el río – fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Sin duda, es otro buen lugar para disfrutar de un atardecer emeritense.
8. Museo Nacional de Arte Romano
Y aunque caminar por las calles de Mérida puede hacerte sentir como si te encontraras en un museo de arte romano, lo cierto es que hay un lugar en el que verás todo ese patrimonio condensado. Lo más original del Museo Nacional de Arte Romano de Mérida es que por él discurre una auténtica calle romana de la antigua Emerita Augusta. Esta vía fue encontrada, por casualidad, cuando se construía el museo, y fue respetada.
En el primer piso te encontrarás con tumbas romanas, así como muestras de la vida religiosa de la época. El segundo piso cuenta con exhibiciones de objetos cotidianos, como vasijas de cerámica y herramientas de piedra. Ya en el tercer piso, hallarás objetos que muestras varias facetas de la vida social de la antigua capital. Aquí se conservan muchas esculturas del teatro y del anfiteatro. Tapices adornan las paredes con una serie de retratos.
En total, el museo contiene más de 35,000 objetos de Emerita Augusta. Una auténtico tesoro que ver en Mérida, tanto si te gusta la Historia como si no.
9. Gastronomía de Mérida
Y como no solo de ver maravillas monumentales vive el hombre, está claro que disfrutar de la gastronomía tiene que ser una de las cosas que hacer en Mérida.
En el centro histórico de Mérida encontrarás un buen número de bares y restaurantes en los que podrás probar platos típicos locales como el cojondongo (picadillo de tomate, pimiento verde, rojo, cebolla, pepino y pan), las patatas al rebujón (parecidas a unos huevos rotos con jamón), la caldereta extremeña de cordero o las migas extremeñas de Mérida. Todo eso sin olvidar, por supuesto, el fantástico jamón ibérico de bellota. ¡Para chuparte los dedos!
10. Arco de Trajano
El gran emperador Trajano – uno de los más poderosos de la antigua Roma y bajo cuyo reinado el imperio alcanzó su cénit – nació en la cercana Itálica sevillana. El Arco de Trajano en Mérida, aunque pequeño – unos 15 metros – en comparación con las otras estructuras romanas de la ciudad, una vez se levantó sobre la calle más importante de Emerita Augusta, el Cardo Maximus (o calle principal). Este arco simplista representa el reinado del emperador Trajano y es uno de los monumentos históricos más importantes que ver en Mérida.
11. Basílica de Santa Eulalia
Y por último, el vestigio más importante que ver en Mérida representando a los tiempos visigodos es la Basílica de Santa Eulalia.
Fue construida en el siglo VI y lleva el nombre de Santa Eulalia, por ser esta la patrona de Mérida. Según los escritos cristianos, Santa Eulalia era una joven virgen cristiana que se oponía públicamente a la creencia en los dioses romanos. Fue torturada y quemada en la hoguera, siendo declarada santa por su martirio. Barcelona y Oviedo también consideran a Santa Eulalia como su patrona. Su fiesta se celebra cada 10 de diciembre.
Fuera de la iglesia hay un santuario dedicado a Marte, el dios romano de la guerra. Las excavaciones debajo de la basílica han descubierto fragmentos de antiguas casas romanas.
Como puedes ver, la capital extremeña hace cierta esa frase que afirma que «las mejores esencias vienen en frascos pequeños». Y es que, hay un sinfín de cosas interesantes que ver en Mérida.