Brasil es un país tan hermoso como vasto. Realmente, casi un continente que es imposible conocer profundamente salvo que cuentes con meses para recorrerlo con toda la parsimonia posible. Por ello, es mejor realizar viajes algo más cortos y concentrados, para descubrir zonas algo menos extensas por las que poder moverte libremente y disfrutar de las maravillas que ofrecen. Algunos de los mejores lugares que visitar en Brasil son Río de Janeiro, las cataratas de Iguazú, Salvador de Bahía y las zonas naturales de Lençois Maranhenses y Chapada dos Veadeiros. Combinando estos cinco sitios, encontrarás un poco de todo: vibrantes urbes, gastronomía, playas, verdes campos, bosques, montes y algunas de las cascadas más imponentes del mundo.
Las ciudades de Río y Salvador son de las más conocidas en Brasil, tanto por su buena onda como por sus monumentos e historia. Las cataratas de Iguazú es, quizás, una de las maravillas naturales más impresionantes del planeta; mientras que Lençois Maranhenses y Chapada dos Veadeiros, son dos lugares de exuberante belleza que sorprenden a todos los viajeros que se internan en ellos.
Descubre Brasil de la mano de Logitravel
Como os hemos contado, Brasil es un país realmente extenso y conviene planificar vuestro viaje con cierta antelación. Para ello, te puede venir muy bien la ayuda de los expertos de Logitravel, quienes han diseñado dos tentadoras rutas que descubren parte de los mejores lugares de Brasil. Descubre su viaje por Salvador, Río de Janeiro y las cataratas de Iguazú, y una exploración a fondo de la bella costa de Río Grande do Norte. ¡Te van a encantar!
Algunos de los mejores lugares de Brasil
Y ahora, vamos a explorar algunos de los imprescindibles de Brasil.
Río de Janeiro
No es la capital de Brasil, pero sí que es la ciudad más conocida del país a nivel mundial. De hecho, Río de Janeiro es una urbe tan desenfadada y desenfrenada, que nunca querría para sí la carga de ser capital. La burocracia y la seriedad no están hechas para ella.
Río de Janeiro es el calor de su Carnaval, el frescor de sus famosas playas – entre las que destacan las de Copacabana e Ipanema -, el ritmo de sus bailes y fiestas, su rica caipirinha, su pasión por el fútbol y sus barrios con personalidad, como los de Lapa o Leblon. Pasar unos días en Río es sumergirte en la idiosincrasia brasileña… Y también divertirte.
No puedes marcharte de la ciudad sin disfrutar de las maravillosas vistas del Cristo Redentor, que domina la ciudad desde los 700 metros de altura del Corcovado. También el Pan de Azúcar debe estar en tu lista, así como la animada playa de Copacabana (donde parecen practicarse todos los deportes playeros posibles), el barrio de Lapa – que alberga algunos de los mejores restaurantes y bares de la ciudad – y el precioso bosque atlántico de Tijuca.
Una ciudad de la que te enamorarás a primera vista.
Cataratas de Iguazú
Es muy complicado describir con palabras la impresionante belleza de las cataratas de Iguazú.
Situadas en la frontera entre Brasil, Argentina y Paraguay, las cataratas de Iguazú son una auténtica maravilla creada por la madre naturaleza.
Para visitar el lado brasileño de las cataratas, tendrás que hacer base en la ciudad de Foz do Iguaçú. Desde la parte brasileña de las cataratas, tendrás unas vistas espectaculares de la famosa Garganta del Diablo, un lugar en el que confluyen varias caídas de agua de potencia abrumadora. Muchas otras cascadas aparecen en un panorama en el que también podemos divisar la bella isla de San Martín, asediada por las cataratas y cubierta de vegetación.
En tierra, la jungla parece tomarlo todo y es habitual encontrarnos con coatíes y distintas especies de monos y lagartos.
Uno de esos lugares que quedan para siempre grabados en tu memoria ¡No te lo puedes perder!
Salvador de Bahía
No son pocos los que dicen que la ciudad de Salvador de Bahía tiene el honor de ser el corazón de Brasil.
La antigua capital del país presenta, hoy en día, una auténtica mezcla de culturas, ritmos y sabores que atrae a viajeros de todo el mundo.
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Un claro ejemplo de ello es el Carnaval de Salvador de Bahía, que es tan famoso y visitado como los de Río de Janeiro y São Paulo.
El centro histórico de Salvador de Bahía posee joyas como el Pelourinho, un colorido y vibrante barrio que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, por su belleza y dilatada historia.
Hoy en día, un Pelourinho rehabilitado posee escuelas de danza y música, centros de arte, un sinfín de bellas iglesias – hay más de 350 en Salvador – y magníficos restaurantes en los que probar la sabrosa gastronomía baiana.
Entre los platos baianos cabe destacar la moqueca – de origen africano -, el acarajé – una galleta hecha con masa de frijol frito, cebolla y sal, y frita en aceite de palma -, el arroz de hauçá – arroz sin sal y cocido, acompañado de una salsa de pimienta, cebolla, gambas ralladas y carne seca frita con ajo y cebolla – y el bolinho de estudante, una galleta hecha con tapioca granulada, coco rallado, canela y azúcar.
Para probar el mejor acarajé debes visitar el bohemio barrio de Rio Vermelho, siempre lleno de vida, sobre todo después del atardecer.
Un atardecer que debemos disfrutar desde la arena de la concurrida playa urbana de Porto da Barra. Es emocionante cuando el astro rey se oculta tras las aguas del océano y la gente rompe a aplaudir.
Lençois Maranhenses
Los Lençois Maranhenses forman parte de uno de los paisajes más únicos en el mundo. En una superficie que abarca 80 km de costa y 25 km hacia el interior, ofrece un sinfín de dunas doradas y blancas – que están en constante movimiento y mueren en playas salvajes -. y unos lagos de agua dulce y belleza extraterrestre.
El lugar es tan especial que ha sido declarado parque nacional y Patrimonio de la Humanidad.
Se encuentra en el estado de Maranhão, en la parte nordeste de Brasil, y es visitado cada año por decenas de miles de viajeros que buscan perderse entre tan inusual expresión de la naturaleza. Se puede recorrer con una combinación de vehículo 4×4, barco y a pie, y aunque hay muchas excursiones de una sola jornada, aquellos que quieren profundizar en el lugar se quedan por 3 o 5 días.
La época ideal para visitar los Lençois Maranhenses es de junio a diciembre, pues la temporada de lluvias suele extenderse de enero a mayo, aproximadamente.
Chapada dos Veadeiros
En el estado de Goiás, situado en la parte central de Brasil y a unos 250 km de la capital, Brasilia, se encuentra el Parque Nacional de la Chapada dos Veadeiros.
El parque se extiende por el altiplano más elevado del centro de Brasil, con ondulaciones que oscilan entre los 600 y 1.650 metros de altura, siendo la Sierra de Santana el punto más elevado del parque.
Allí nos esperan grandes extensiones arboladas, numerosos ríos (siendo el río Preto el más importante de ellos), impresionantes cañones y espectaculares cascadas, destacando entre ellas la del Salto del Río Preto, en la que el agua se precipita desde unos 120 metros de altura.
Los amantes de la flora podrán disfrutar aquí de más de 25 especies diferentes de orquídeas, mientras que entre la fauna destacan el ciervo del pantanal, la capibara y el tucán de pico verde. Podremos admirar todo ello con algunas de las excursiones guiadas que recorren los senderos de este exuberante paisaje.
Lo mejor de Brasil son las playas y que tenga una de los ecosistemas más grandes, en gran parte eso lo vuelve muy especial.