Durante las últimas décadas, el rafting se ha convertido en una de las actividades al aire libre más emocionantes y exitosas en España. Al poder adecuar el nivel de la actividad a la experiencia y el gusto de cada uno, ha hecho que sea popular entre personas de todo tipo, desde los que buscan vivir una aventura sin igual repleta de adrenalina, hasta los que tan sólo quieren realizar un paseo agradable en barca hinchable para disfrutar de un paisaje de ensueño y sentir algo de emoción en sencillos rápidos. Sea cual sea tu perfil, seguro que te gustará saber cuáles son los mejores lugares de España para hacer rafting.
Tras haber probado este deporte de aventura en distintos lugares del mundo (España, Nepal o Ecuador, por ejemplo), te lo recomiendo encarecidamente, pues después de realizar la actividad te sentirás inmensamente feliz. Es lo que tiene juntar naturaleza con adrenalina. Nunca falla.
Quizás, para saber si te gusta, lo primero es probar en casa, así que atento a cuáles son algunos de los mejores ríos para hacer rafting en España.
Índice de contenidos
1. Noguera Pallaresa, Pirineo Catalán
Una buena parte de los ríos que se pueden declarar nobleza del rafting en España se encuentran en los Pirineos, y el rey es el Noguera Pallaresa.
Un río con nombre y apellido, cuna de este deporte en España. Considerado por los amantes de la aventura como uno de los mejores ríos para la práctica de actividades acuáticas en Europa.
Hacer kayak o rafting en Noguera Pallaresa es embarcarse en una aventura única, con pasos de diferentes niveles de dificultad (hasta grado IV de dificultad, siendo el máximo nivel el grado V) y el increíble paisaje del Pirineo leridano para nuestro disfrute.
La ruta comercial completa tiene unos 52 kilómetros y va desde Llavorsí hasta Figuereta. Se puede hacer en unas 7 horas (pausa para comer incluida), lo que da una idea de la velocidad de este río.
Si este trayecto te parece demasiado largo, siempre puedes realizar el descenso del tramo de Llavorsí a Rialp, de 14 kilómetros. Es una de las rutas más emocionantes y divertidas, y está catalogada como de grado III.
Los más experimentados, sin embargo, prefieren realizar la travesía en un tramo más alto del río. Desde Alos d’Isil hasta la presa de Borén, el descenso es muy técnico y potente (nivel IV-V), por lo que solo se recomienda a las personas más experimentadas.
Elijas lo que elijas, siempre disfrutarás en uno de los mejores lugares de España para hacer rafting. Yo lo hice, pues aquí fue mi bautismo de fuego cuando tan sólo tenía 20 años. Y este deporte me enganchó para siempre.
2. Río Gállego, Pirineo Aragonés
Situado en el Pirineo Aragonés, el río Gállego es uno de los más atractivos para la práctica del rafting y el piragüismo. En él encontramos tramos que van del nivel II al IV, especialmente durante el deshielo, cuando hay mayor caudal. Por ello, es uno de los mejores lugares para hacer rafting en España, tanto para familias como para remeros de nivel más avanzado.
Uno de los tramos más exigentes es el que va desde Sabiñánigo hasta Murillo de Gállego, pasando por el desfiladero de los Mallos de Riglos. Pero aquí no hace falta hacer tanto para disfrutar de una buena bajada.
Siguiendo la ruta clásica, que parte del embalse de La Peña y llega hasta Murillo (unos 12 kilómetros), tendrás una gran experiencia de rafting por el río Gállego. Esta es una sección de grado III, en la que puedes encontrar algunos pasos de grado IV, en los que podrás vivir la emoción intensamente.
Lo mejor, sin embargo, es el paisaje, que cuenta con las impresionantes vistas de los Mallos de Riglos vigilando tu recorrido.
Si te encuentras en Pamplona y tienes ganas de vivir una aventura acuática, te alegrará que el cercano río Esca es uno de los mejores lugares de España para hacer rafting.
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En el valle del Roncal encontramos otro de los descensos más bonitos de los Pirineos. El río Esca, desde la localidad de Burgui (en Navarra) hasta Sigüés (en Zaragoza) ofrece un recorrido de grado IV con buenos rápidos y posibilidades para hacer, también, barranquismo.
Es el único descenso de esta graduación en Navarra, y suele tener lugar en primavera, durante el deshielo. El paisaje, además, es completamente único.
Una vez pasada la localidad de Salvatierra, el río se adentra en la Foz de Burgui, un abrupto desfiladero excavado por el río que sirve de hogar a numerosas aves rapaces.
La emoción está asegurada durante todo el descenso, con pasos míticos como el Rulo de Adolfo, hasta llegar al merendero junto al río en la localidad de Sigüés.
EXCURSIONES POR PAMPLONA EN ESPAÑOL
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4. Río Cabriel, Comunidad Valenciana
El Cabriel es conocido por ser uno de los ríos con aguas más claras de toda Europa. Lo encontrarás en la Comunidad Valenciana.
Hacer rafting en el Cabriel no solo es una experiencia emocionante, sino también paisajística, ya que te llevará por el Parque Natural de Las Hoces del Cabriel y su desfiladero.
Este lugar realmente se adapta a todo tipo de personas, ya que puedes elegir entre recorridos fáciles, intermedios y difíciles. Si quieres acercarte al agua y vivir los rápidos con más intensidad, puedes probar el canoa-rafting en un biplaza hinchable en el que sentirás hasta la más mínima de las olas.
Este es otro de los ríos que he vivido en primera persona y fue una experiencia agradable, aunque algo menos emocionante que en el Noguera Pallaresa. Del Cabriel me quedo con su bello y relajante entorno natural, así como el increíble color de sus aguas y los pueblecitos de alrededor, como la encantadora localidad de Alcalá del Júcar.
Además, después de la experiencia de rafting, puedes relajarte en las cercanas aguas termales del Balneario de la Concepción.
5. Río Guadalfeo, Granada
Y, finalmente, nos vamos al sur para encontrar otro de los mejores lugares de España para hacer rafting. En este caso, a la provincia de Granada, por donde fluyen las aguas del río Guadalfeo.
El río Guadalfeo tiene el nivel más alto de rafting de toda Andalucía, con rápidos que alcanzan el grado III-IV. Es un descenso de nivel avanzado que se puede realizar en primavera o invierno, ya que necesita lluvias o deshielos provenientes de las nieves de las montañas de Sierra Nevada.
El descenso completo atraviesa las Alpujarras, desde el Cortijo del Granaillo hasta el embalse de Rules. Son 11 kilómetros de recorrido que se pueden dividir en dos partes. La primera parte, hasta el puente romano de Órgiva, es la más tranquila (aunque no te pienses que será aburrida). Este tramo de rafting en el río Guadalfeo es perfecto para iniciarse en la actividad y pasarlo en grande.
A partir del puente de Órgiva el descenso se vuelve más activo, con numerosos obstáculos que hay que sortear con rapidez y reflejos. Este tramo requiere más esfuerzo y tener una buena coordinación con el resto de remeros de tu balsa.